Pan árabe, para los amigos.
Adoro adoro este pan porque es de esas cosas mágicas que pasan en la cocina. Se infla y hace su propio bolsillo para guardar el relleno, ¿qué más se le puede pedir a un pan?
Es muy sencillo de hacer, pero si van a poner manos a la obra, les recomiendo hacer una buena cantidad y guardarlo en el freezer. Pueden hornearlos con bastante harina y usar esa misma harina cocida para que no se peguen. Duran hasta 12 meses y quedan como recién hechos.
La versión que les dejo hoy es integral, pero pueden hacerla con harina blanca. Si quieren enriquecerlos pueden incorporar salvado de avena o trigo, hierbas o especias. Lamentablemente, para mí no hay ninguna versión sin gluten que resulte parecida. Si quieren hacer este sandwich y no consumen gluten, les recomiendo hacer unas buenas arepas y a otra cosa mariposa.
Pan pita integral
12 unidades
3 tazas de harina de trigo integral orgánico
2 cdtas de levadura deshidratada
1 pizca de sal marina
1 taza de agua aprox
Mezclar los ingredientes secos.
Agregar el agua de a poco e ir mezclando con una cuchara de madera. Digo una cuchara de madera porque es fácil de agarrar y permite hacer fuerza, pero pueden usar el utensilio que tengan a mano.
Es posible que engan que ajustar la cantidad de agua porque la harina integral puede ser muy variable. Lo importante es que no quede harina seca al momento de volcar en la mesada y que tengan una masa muy tierna y elástica luego de amasarla unos 7 minutos. Si sienten que su bollo está duro, no tengan miedo de agregar agua por encima. Va a costar un poco integrar ese agua, pero lo van a lograr y el bollo va a quedar tierno. En esta receta es importante que no falte agua porque es lo que va a hacer que su pan se forme correctamente.
Dejar leudar durante 1 hora y media en un lugar templado. Debe estar cubierto con un wrap o paño de cocina si están en una zona húmeda.
Dividir la masa en 12 bollos, sin manosear mucho, y aplanar con un palo de amasar hasta que tenga 5mm de espesor. No importa si no son uuuultra circulares.
Distribuir en unas placas espolvoreadas con abundante harina y cubrir con un paño de cocina.
Dejar leudar unos 30 minutos.
Precalentar el horno a 225° y colocar la placa tratando de perder la menor cantidad posible de calor. Cocinar unos 12 minutos hasta que vean que parecen globos.
Retirar, apilar y cubrir con un paño para mantener húmedos.
Si van a freezar, dejar enfriar primero.
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